Berrea 2016

Se iba haciendo de día, cuando llevaba ya 1 hora escuchando berrear muy encelado un venado, tapado entre las jaras y la carrasca, sin dar la cara se abría la luz de la mañana, ya no quedaba nada más que unos minutos, cuando siento a mi izquierda, como aplastaba la hierba un animal, me muevo suavemente si hacer ruido, cuando arranca en una estrepitosa carrera arrasando las retamas, un hermoso venado, el cual disparó a unos 10 metros a bocajarro, sin ningún acierto, cuando se aleja a unos 100 metros subiendo una colina y de un silbido, se para a curiosear cuando con ya muy intencionado criterio estaba la cruz de mi malinncher, subida a su lomo, que de un certero disparo lo hace arrancar hacia el monte de nuevo, con la suerte de ir muy mal herido.


En un corto rastro mi teckel Dama me da la alegría dando con este precioso animal.


a veces la suerte nos acompaña, esta vez perdió la partida.

José Antonio Rodríguez García.